lunes, 26 de octubre de 2009

Sin Casa, Sin Derechos

The Homeless Body. Samira Kawash.

Los cambios en la economía mundial y la falta de políticas públicas por parte del Estado para canalizar y anticiparse a estos cambios convergen en varios problemas de interés creciente, sobre todo dentro las ciudades, que es donde la mayoría de la población mundial se encuentra. Pero cabe señalar que si bien algunos de estos problemas se presentan dentro de las agendas gubernamentales o los titulares de periódicos importantes, aunque no pase a mayores, hay otros que se prefieren mantener en un bajo perfil, en la mayoría de los casos por conveniencia del gobierno para poder realizar represiones contra estos grupos sin presiones. Un tema que no tiene mayor relevancia, no sólo en esta ciudad, sino incluso en las principales ciudades del mundo, esto se puede apreciar porque dentro de los medios de comunicación es muy rara la vez en que aparece un tema relacionado con este grupo, dentro de la misma sociedad hay que "hacer memoria": ¿cada cuándo nos atrevemos a dar si quiera más allá de una opinión? No se pasa más allá de concebir a los indigentes como un problema social que el gobierno no soluciona, como tantos más y que hay otras cosas más importantes que este o en el mejor de los casos, es una forma de poder hacer caridad o tu buena obra del día. Más allá de cualquier tema, esta es la impresión que se tiene de estas personas, y no lo menciono por continuar la corriente, sino por el contrario, hay que tratar de quitarnos estos prejuicios que traemos de antemano, en muchos casos por la propia ignorancia a la que estamos sometidos, aquí se trata de romper barreras. Empecemos propiamente por conceptualizar la idea de un indigente, un repudio instantáneo hacia estas personas, lo cual llega hasta el desprecio hacia ellos, en alguna ocasión a lo largo de mi vida me he topado con varias personas y, en mi caso, no es desprecio, sino que lamentablemente el descuido de estas personas en su higiene he tenido que evitarlas porque realmente es un olor desagradable, algo que tiene toda la lógica del mundo debido a las condiciones en que sobreviven, pero de igual manera las personas que supuestamente tienen acceso a estos servicios, en ellas también podemos encontrar personas que mantienen una higiene deplorable, y de igual manera debería caer el prejuicio, incluso, sin atreverme a juzgar pero considerando las circunstancias, a estas personas se les debería criticar de mayor manera, eso si siguiéramos la lógica. Entonces ¿porqué el desprecio hacia estas personas?. A lo largo de varias lecturas relacionados al tema, en un punto en que se ha coincidido es que, una persona puede acceder a la sociedad, sólo si tiene propiedad, por lo que un indigente queda automáticamente excluido de la sociedad, al no poseer propiedad lo que le queda es el espacio público, siendo este el único lugar donde puede refugiarse. Pero el tema del espacio público se ha tornado cada vez más cambiante a partir de la relación económica y el debate que ha resurgido entre lo público y lo privado, por lo que nos queda: ¿de quién es el espacio público?, este se ha visto alterado hacia una tendencia más privada, pero no porque las barreras de concreto se hayan puesto, pero si se ha convertido sólo para algunos, en los que por supuesto no se consideran a los indigentes, estos se perciben como una "amenaza" hacia la sociedad civil argumentando que invaden los espacios públicos, pero detrás de este punto de vista, que pudiera bien acreditarse a cualquier empresario es una postura que mantiene el gobierno. Se le ve a este problema como una amenaza porque dentro de la concepción de ciudad que se tiene dentro de las esferas más altas de la sociedad puede decirse que estos grupos "afean" a las ciudades, sobre todo los espacios públicos, pensemos en un ejemplo, el caso del Zócalo de la ciudad de México, el cual es dentro del terreno turístico algo que no puede dejarse de visitar, en un principio cuando este se inauguró era un parque, con el diseño de cualquier alameda que se pueden encontrar en distintos puntos de la ciudad, pero entre 1957 y 1958 se transformo quedando así una enorme plaza, la cual tiene en medio un asta solitaria, sin un punto donde pueda haber una sombra permanente, en este caso es curioso ver desde lo alto de los edificios aledaños como la gente en busca de sombra a eso de las once de la mañana siguen el movimiento de la sombra del asta, ahora pensemos ¿qué representaría el Zócalo si el diseño de una alameda aún existiera? Es inconcebible que la gente pueda reunirse en un lugar donde no hay en que postrarse o cubrirse del sol. El espacio público cada día es más reducido o menos accesible, ya sea porque se ha quitado o se ha descuidado, pero que es un tema que preocupa o debería a toda la sociedad, aunque específicamente se nos quiere hacer ver que la principal amenaza son los indigentes. Desgraciadamente me ha tocado presenciar como un indigente es movido de una banca en un parque por un policía para que dos señoras, de vista por su vestimenta, de una clase prominente se puedan sentar, porque el parque estaba lleno. En países como Estados Unidos, la situación entre la policía y los indigentes ha llegado a extremos en donde se han convertido en caminantes permanentes donde no pueden siquiera descansar por un momento cuando la policía ya los esta corriendo, ¿porqué esperar hasta llegar a esta situación? o en casos aún más extremos su eliminación. Son personas y al final de cuentas son también ciudadanos de un país, por lo que el abuso hacia este sector es apabullante y con políticas en el caso de nuestro país nulas por parte de nuestras autoridades, y en el caso del sector privado la forma de usa para quedar bien entre la sociedad, no son soluciones para el problema. Ahora bien si el problema no se puede eliminar se han puesto practicas, las cuales tienen como finalidad el minimizar a este grupo, quitando todo beneficio público a su alcance, como baños públicos o el agua de las fuentes, sólo por mencionar algunos, por lo que es para considerarse si estas personas en verdad es que quieren vivir de la manera en que lo hacen, el tener falta de higiene puede resolverse incorporando baños públicos, por ejemplo, se les esta encerrando hasta un punto en donde no queda más remedio que tomar medidas extremas, analicemos un poco, porque incluso estas medidas que son tomadas para minimizar a este grupo nos afectan en gran medida al resto de la sociedad, tan sólo el hecho de que no haya baños públicos dentro de un parque es sinónimo de que el tiempo que decidas estar en ese lugar no es demasiado, porque no logra satisfacer todas tus necesidades. Incluso con estas medidas de filantropía, son utilizadas por complejos moralistas, como caridad pero nunca para resolver el problema de fondo. Hay que observar el problema en toda se extensión y la primera pregunta que deberíamos hacernos es ¿porque es que esas personas se encuentran en esa situación?, como es que alguien no va a preferir la comodidad de una casa con todos los servicios a vivir en la calle con todas las carencias posibles. Antes de si quiera poder dar un juicio necesitamos observar cuales son las causas a las que estas personas las han orillado a esta situación, factores como: deficiencias mentales, problemas de adicción, problemas familiares(violencia), o incluso la propia dinámica de la economía, que con sus fluctuaciones y su nulo interés en la sociedad ha provocado un aumento en el desempleo de la población. El Estado debería de funcionar anticipando los posibles problemas que rodean a la sociedad, si bien pensamos en posibilidades de como desaparecerlos, porque mejor no anticiparnos a estas problematicas, claro esta que nunca se va a poder beneficiar a toda la población, pero si que fuera a la mayoría, la que más se pueda, y al mismo tiempo estos grupos son focos rojos, porque sus necesidades no son cumplidas pensemos en el caso de los adictos, que en determinado momento pueden convertirse, debido a sus adicciones, en rateros por poner un ejemplo, pero si se anticipa al problema desde una buena educación con respecto al problema, suficiente información de las consecuencias, por parte del gobierno y sus familias, y si ya se encuentran dentro de esta situación la creación de instituciones que puedan lograr su rehabilitación, que en principio debería ser trabajo de la Secretaría de Salud al tratarse de un problema correspondiente a la salud y bienestar humano, pero como se ha visto en el caso de México, con estos programas de AA, que con un mayor interés han podido sobrellevar este peso, en vez de dejar crecer los problemas hasta un punto donde, si hay atención de la sociedad se trata de sobrellevar y en caso de que no exista pasar sobre de ellos sin importar nada. Cuantos problemas podrían aminorarse si tan sólo existiera el interés hacia este grupo, en el caso sobretodo de las personas adictas, que cometen crímenes por mantener el vicio, que son actos si pequeños pero que principalmente afectan a la sociedad de bajos recursos, y que después se vuelve en otros problemas de mayor relevancia, como lo son la inseguridad.

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